Fernando "Pino" Solanas, ex candidato a presidente por Proyecto Sur, opinó que lo que hizo Roberto Lavagna al acordar con Néstor Kirchner "debería ser delito" y que nadie se debería sorprender si el nuevo PJ también incluyera a Carlos Menem en su conducción.
Defensor a ultranza de los recursos naturales, crítico de la situación de los ferrocarriles y de la industria minera, Solanas dice que sus adversarios lo llaman "cineasta" para descalificarlo. El se defiende con sus más de 50 años de militancia política, originada en el peronismo.
Para Solanas la democracia argentina es una farsa "porque se hizo ideología la traición" y porque no se toma el voto como un contrato.
-¿Cómo ve la reforma del PJ que encabeza el ex presidente Néstor Kirchner?
-El PJ es una gran central de negocios y repartija de estamentos de poder. Kirchner es el cacique-caudillo de turno. No tiene visión de estadista.
-¿Qué le pareció el acuerdo con Lavagna?
-Hay que castigar la traición al voto, y a Lavagna, por supuesto. La traición se hizo ideología. Habría que implementar la revocatoria de mandatos para los que no cumplen con el programa que presentaron en campaña.
-¿Lo sorprendió?
-No, eso pasó siempre en el justicialismo. Se dividen antes de las elecciones y ocupan el escenario con variantes que tienen posturas iguales. Luego se unen.
-¿Se le vienen otros casos a la mente?
-Debería ser delito burlar el voto como hicieron Borocotó, Lavagna y Menem. El voto es un contrato para seguir un programa. Así la democracia es una farsa.
-¿Para qué se unieron Kirchner y Lavagna?
-Para seguir manejando el sistema neoliberal de saqueo. Que nadie se asombre: hasta Menem va a estar en el PJ.
-¿Habrá otro acuerdo, cree?
-Nadie habla de la negociación secreta para frenar todas las causas que involucraban a Menem. Por eso, Kirchner sacó a Gustavo Béliz del Ministerio de Justicia.
-¿Y qué habría ganado el oficialismo en esta negociación?
-No sé cómo fue la puja de poder. Pero a Menem hasta lo dejaron jurar como senador mientras estaba Cristina en la Comisión de Asuntos Constitucionales.
-¿Cómo vio a la Presidenta en sus primeros dos meses de gestión?
-¿Quién es? ¿Dónde está? Lo único que hizo fue lanzar la provocación más grande a millones de argentinos con su anuncio del tren bala. Es parte de un modelo elitista y discriminatorio.
-¿Ve una presidenta débil con el protagonismo de su marido?
-Es un matrimonio que gobierna y Néstor es el timón.
-¿Qué opina de los escándalos de corrupción que involucraron al Gobierno?
-Eso es minicorrupción. Lo de la valija es una "aceituna" comparado con lo que se llevan las multinacionales mineras.
-¿Cómo evalúa el papel de la oposición en las últimas elecciones?
-Lamentablemente no era oposición lo de Elisa Carrió ni lo de Lavagna. Las tres fuerzas que sacaron más votos no tenían diferencias en el modelo económico.
-¿Hubo debilidad en la oposición por la cantidad de candidaturas presidenciales?
-Es como la multiplicidad de los canales de televisión, no garantiza que haya más contenidos.
-¿Eso favoreció el triunfo kirchnerista?
-Cristina ganó con los viejos aparatos de matones y aprietes. Es muy difícil controlar los comicios.
-¿Dice que hubo fraude?
-La democracia es una farsa también porque los votos se roban o se adulteran. Nosotros calculamos que deberíamos haber sacado el doble de lo que nos contabilizaron.
-¿Qué le parecen los planes oficialistas de reforma política?
-Es una monstruosidad que impidan que se creen nuevos partidos. Y reducir su número va en contra de la ciudadanía.
-¿Incluiría a los Kirchner en el espacio de la izquierda latinoamericana?
-Yo no los ubico con los presidentes de Bolivia, Venezuela y Nicaragua. En la Argentina, Proyecto Sur es la expresión de ese espacio.
-¿Cómo sigue su Proyecto Sur?
-No fue sólo una oferta electoralista. Somos un movimiento político, social y cultural. Lo electoral es el instrumento para llevar adelante nuestro proyecto.
-¿Qué balance hace de su participación en las elecciones de 2007?
-Fue bueno, muy bueno. Uno debe aspirar a más, pero estamos muy contentos con un quinto lugar. Fue el prólogo a una fuerte participación en 2009 y 2011.
Emilia Subiza
Perfil.com
Carrera política
Con sus 71 años, lleva más de 50 de militancia política. Durante la dictadura estuvo exiliado en Europa, desde donde denunció internacionalmente la situación de la Argentina. Regresó en 1983.
Contra Menem
Fue uno de los primeros en denunciar "la traición" de Menem a sus votantes. Se desempeñó como diputado de 1993 a 1997. En 1994 fue constituyente. No participó de elecciones desde que terminó su mandato hasta 2007, cuando compitió para presidente y para senador.
Tras la cámara
Es un cineasta con una mirada íntimamente ligada a su relación con la política. Recibió premios internacionales y su último film es Argentina latente.