Los sindicatos docentes de todo el país concretarán hoy un paro nacional de 24 horas en represalia por la represión que sufrieron los maestros porteños que se concentraron ayer frente a las oficinas del jefe de Gobierno Mauricio Macri, en reclamo, entre otros ítems, de un aumento salarial del 20 por ciento. Todo comenzó luego del mediodía, cuando los maestros, como lo habían anunciado, se concentraron en Avenida de Mayo al 500 para instalar un gazebo, e iniciar una vigilia de 100 horas de protesta. La medida fue resuelta la semana pasada por los 17 sindicatos docentes de la ciudad y el viernes último presentaron un pedido de autorización para evitar que la justicia contravencional porteña los desalojara.
El pedido nunca fue contestado por Macri. Su negativa permitió que la policía reprimiera a los manifestantes bajo el amparo del artículo 78 del Código Contravencional de la ciudad. La norma impide la ocupación de espacios públicos en el territorio porteño y, salvo expresa orden comunal, habilita a la Policía Federal para que actúe de oficio. Pero esa facultad que no fue ejercida hasta que la infantería se comunicó con Valeria Massaglia, una de las titulares de la Fiscalía 7, quien dio vía libre “para que impidieran la instalación de la carpa”, según explicaron fuentes del fuero judicial. Así lo hicieron, y lo que la comuna consideró un posible remedio lo complicó todo: “Apenas empezamos a instalar la carpa, aparecieron dentro y fuera de nuestra columna unos 20 policías de civil que trataron de detenernos”, contó la maestra Paula Rivero, integrante de la Junta Calificadora del Distrito 4 y una de las docentes que más golpes recibió. “Al principio no podíamos creer que estuviéramos rodeados por policías de civil que nos querían quitar la carpa, pero cuando nos dimos cuenta, resistimos todo lo que pudimos”, contó Alicia Pongetti, una residente que luego terminó apretujada en el medio del cerco policial. Así comenzó la saga de golpes, gases y forcejeos entre policías y maestros que ganó la atención de toda la televisión nacional y que fue transmitido en vivo y en directo a todo el país.
A las pocas horas, los tiempos del conflicto cambiaron: la vigilia sumó el doble de adhesión. Sin embargo, a las 17.30 todo empeoró. Cuando faltaba media hora para que la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE-CTERA) confirmara la realización del paro nacional, hizo su aparición en medio de la multitud el jefe de Gabinete del Ministerio de Medio Ambiente y Espacio Público, Fabián Rodríguez Simón. Ubicado entre los docentes, les recordó que no estaban autorizados a instalar la carpa. Entonces comenzaron nuevos forcejeos que fueron disuadidos con el gas mostaza que arrojó la policía. ... Continuar leyendo